Florida, uno de los destinos más populares para los turistas canadienses, está sintiendo el impacto de una fuerte caída en los viajes desde Canadá hacia Estados Unidos, impulsada principalmente por tensiones políticas y la retórica controvertida del expresidente Donald Trump. Funcionarios de turismo en todo el estado ya están observando una disminución en las reservas y expresan su preocupación por las consecuencias económicas.

Visit Lauderdale y Visit Orlando confirmaron que tanto las reservas anticipadas de viajes como de hoteles por parte de canadienses han bajado notablemente. “Para la gente más amable del planeta, que son los canadienses, el lenguaje es fuerte”, dijo Stacy Ritter, directora ejecutiva de Visit Lauderdale, aludiendo a los comentarios directos de los potenciales visitantes.

Nuevos datos indican que el interés de los canadienses en visitar Estados Unidos está en caída libre. La firma de análisis de aviación OAG informa que las reservas para vuelos entre Canadá y EE.UU. entre abril y septiembre han bajado más del 70% en comparación con el mismo período del año anterior. Esta caída se atribuye a las tensiones políticas, como las propuestas de Trump de convertir a Canadá en el “estado 51” y la imposición de aranceles, que han despertado un fuerte nacionalismo canadiense y un creciente resentimiento hacia EE.UU.

“Esta fuerte caída sugiere que los viajeros están retrasando sus decisiones de reserva, probablemente debido a la incertidumbre en torno al conflicto comercial más amplio”, explicó John Grant, analista jefe de OAG.

Las consecuencias para la economía basada en el turismo de Florida podrían ser significativas. La Asociación de Viajes de EE.UU. estima que una disminución del 10% en los viajes canadienses podría costar 2.100 millones de dólares en ingresos y generar la pérdida de 14.000 empleos.

Las aerolíneas también están reaccionando. La capacidad de asientos en vuelos desde ciudades canadienses hacia el Aeropuerto Internacional de Tampa se redujo en un 12% en abril, según informó el Tampa Bay Times. Los recortes fueron aún mayores en los aeropuertos de Miami y Fort Lauderdale-Hollywood.

Tradicionalmente, los turistas canadienses han tenido un papel clave en el turismo de Florida. Representan aproximadamente el 2% del total de visitantes del estado y el 3% de los turistas anuales del condado de Pinellas. Sin embargo, el clima político actual está alejando a muchos.

“Amo Dunedin, pero este año no voy a ir, y quizás nunca más”, comentó Larry Milson, residente de Toronto, reflejando el sentir de muchos compatriotas.

A pesar de datos alentadores sobre los ingresos fiscales por hospedaje en el condado de Pinellas durante diciembre y enero, las autoridades advierten que los resultados de febrero y marzo serán clave para entender el verdadero impacto a largo plazo.

Mientras las relaciones entre Estados Unidos y Canadá se deterioran, la industria turística de Florida podría verse obligada a replantear su estrategia para uno de sus mercados internacionales más fieles.