- Región:
- EEUU
- Categoría:
- Turismo
La industria de viajes de EEUU en estado de alerta por propuesta del Senado para recortar un 80% el financiamiento de Brand USA
La industria del turismo en Estados Unidos atraviesa una situación crítica tras la propuesta del Comité de Comercio del Senado de reducir drásticamente el financiamiento de Brand USA, pasando de 100 millones a solo 20 millones de dólares. Este recorte, incluido en un nuevo plan presupuestario presentado por el Partido Republicano, ha generado gran preocupación entre los líderes del sector turístico, quienes advierten sobre graves consecuencias para una de las industrias más importantes del país.
Brand USA, la organización público-privada creada por el Congreso en 2010 para promocionar a Estados Unidos como destino internacional, cumple un rol clave en la atracción de visitantes. Sus campañas generan importantes retornos económicos, contribuyendo a una economía turística de 2,9 billones de dólares y al sostenimiento de más de 15 millones de empleos en el país.
“Este recorte del 80% no es solo un ajuste presupuestario, es una amenaza directa a la competitividad de Estados Unidos en el mercado turístico global”, advirtió una fuente cercana a las operaciones de Brand USA. “Una reducción así eliminaría prácticamente nuestra capacidad de promocionar al país a nivel internacional”.
La propuesta forma parte del proceso de reconciliación presupuestaria liderado por el senador Ted Cruz (R-Texas), presidente del Comité de Comercio, Ciencia y Transporte del Senado. El recorte no solo afectaría los fondos directos a Brand USA, sino también los aportes equivalentes que recibe del sector turístico privado, multiplicando el impacto negativo.
Si se aprueba, este recorte podría significar:
- La cancelación de campañas de marketing internacional.
- Reducción significativa de personal y operaciones.
- Un debilitamiento de la presencia de EE.UU. en el competitivo mercado global del turismo.
Los líderes del sector instan al Congreso a respaldar los 100 millones de dólares propuestos por el presidente Biden en su presupuesto 2025 y a restaurar por completo los fondos para Brand USA. Advierten que no hacerlo podría derivar en la pérdida de miles de millones en ingresos turísticos, justo cuando los viajes internacionales muestran signos claros de recuperación.
“El Congreso debe actuar ahora”, señaló un defensor del sector. “No se trata solo de promocionar monumentos, sino de proteger empleos, impulsar a pequeñas empresas y defender un pilar clave de la economía estadounidense”.
Si bien Brand USA ha enfrentado amenazas de recortes presupuestarios en el pasado, esta propuesta representa una de las más graves en su historia. Mientras la industria se moviliza para defender a su organismo de promoción, el resultado de esta batalla presupuestaria definirá el futuro del marketing turístico estadounidense por muchos años.