Washington, D.C. – 2 de abril de 2025. En un movimiento que marca un cambio significativo en la política comercial de EE.UU., el presidente Donald Trump ha declarado una emergencia económica nacional y ha firmado una orden ejecutiva que impone un arancel base del 10% sobre prácticamente todos los bienes importados. Además, Trump anunció una serie de aranceles recíprocos para decenas de países, citando prácticas comerciales desleales y la necesidad urgente de restaurar el sector manufacturero estadounidense.

Hablando desde el Jardín de las Rosas durante un evento titulado "Make America Wealthy Again" ("Hacer a América Rica de Nuevo"), Trump argumentó que Estados Unidos ha sido explotado sistemáticamente por naciones extranjeras que, según él, imponen barreras a las exportaciones estadounidenses mientras se benefician del acceso al mercado de consumo de EE.UU.

Aranceles masivos impactan a los principales socios comerciales

La nueva política incluye aranceles recíprocos que varían según el país, con algunas de las tarifas más altas impuestas a Vietnam (46%), Bangladesh (37%), Camboya (49%) y Sri Lanka (44%). Otros socios comerciales clave de EE.UU., como China (34%), la Unión Europea (20%), Japón (24%) y Corea del Sur (25%), también fueron afectados con aumentos arancelarios significativos.

La lista completa de países afectados incluye:

China: 34% | Unión Europea: 20% | Corea del Sur: 25% | India: 26% | Vietnam: 46% | Taiwán: 32% | Japón: 24% | Tailandia: 36% | Suiza: 31% | Indonesia: 32% | Malasia: 24% | Camboya: 49% | Reino Unido: 10% | Sudáfrica: 30% | Brasil: 10% | Bangladesh: 37% | Singapur: 10% | Israel: 17% | Filipinas: 17% | Chile: 10% | Australia: 10% | Pakistán: 29% | Turquía: 10% | Sri Lanka: 44% | Colombia: 10%

Una respuesta al déficit comercial de EE.UU.

Trump justificó la implementación de estos aranceles como una respuesta al déficit comercial de EE.UU., que alcanzó un récord de 1,2 billones de dólares en 2024. Aunque los economistas señalan que este déficit refleja principalmente desequilibrios en bienes y no en servicios —donde EE.UU. en realidad tiene un superávit—, la administración ha hecho de la reconstrucción de la manufactura nacional una prioridad.

"Estados Unidos no será aprovechado nunca más", declaró Trump. "Durante demasiado tiempo, las naciones extranjeras han hecho imposible que los trabajadores y empresas estadounidenses compitan. Eso termina hoy."

Los mercados reaccionan y se espera represalias

Los mercados reaccionaron negativamente al anuncio, con una caída en los futuros de acciones estadounidenses en el comercio fuera de horario. Los inversores temen que los aranceles desencadenen medidas de represalia por parte de los principales socios comerciales de EE.UU. La Unión Europea, México, Canadá, China, Japón y Corea del Sur ya han manifestado su intención de responder con contramedidas.

La incertidumbre sobre la política comercial de EE.UU. ha provocado interrupciones en los negocios, con empresas deteniendo decisiones de inversión y consumidores enfrentando la posibilidad de precios más altos en productos importados.

Argentina enfrentará un arancel del 10% en todas sus exportaciones a EE.UU.: la tarifa mínima establecida por Trump

En un cambio drástico en la política comercial de EE.UU., el presidente Donald Trump anunció nuevos aranceles generalizados a las importaciones globales, imponiendo un arancel base del 10% a casi todos los productos que ingresan al país. Argentina, junto con Brasil, Chile y otras naciones latinoamericanas, enfrentará esta tarifa mínima como parte del plan de Trump para aplicar lo que él llama "equidad comercial recíproca".

¿El inicio de una guerra comercial global?

Si bien la administración Trump insiste en que los aranceles son necesarios para corregir décadas de desequilibrios comerciales, los críticos advierten que podrían derivar en una guerra comercial global. Los economistas alertan que el aumento en los costos de importación podría generar inflación, interrumpir las cadenas de suministro y perjudicar a las empresas estadounidenses que dependen de materiales extranjeros.

El anuncio marca uno de los movimientos comerciales más agresivos de la administración Trump, con consecuencias a largo plazo aún por determinar. Mientras los líderes mundiales evalúan sus respuestas, el mundo observa si este cambio de política fortalecerá la industria estadounidense o sumirá al comercio internacional en una crisis aún mayor.