La oficina de la presidenta Tsai Ing-wen reiteró en un comunicado brindado por el portavoz presidencial que Taiwán representa un "país soberano y democrático", en respuesta a los comentarios del líder chino Xi Jinping en su discurso de las últimas horas.

En la inauguración del 20° congreso del Partido Comunista de China, Xi dijo que Beijing seguirá esforzándose por lograr una "reunificación" pacífica con Taiwán, pero nunca prometerá renunciar al uso de la fuerza.

Específicamente, advirtió que China se reserva la opción de tomar todas las medidas necesarias contra la "interferencia de fuerzas externas" y los "separatistas" que buscan la independencia de Taiwán.

Como solución, dijo Xi, el modelo de "un país, dos sistemas", bajo el cual Beijing gobierna Hong Kong y Macao, sigue siendo "el mejor medio" para lograr la "reunificación" de los dos lados del Estrecho de Taiwán.

En respuesta, el portavoz presidencial Xavier Chang dijo en un comunicado que el equipo de seguridad nacional de Tsai estaba monitoreando de cerca el Congreso del Partido, en el que se espera que Xi obtenga un tercer mandato de cinco años.

Chang reiteró que la República de China (Taiwán) es un "país soberano e independiente" y que la opinión pública mayoritaria de Taiwán ha rechazado claramente la idea de "un país, dos sistemas".

"El consenso del público taiwanés es que la soberanía territorial, la independencia y la democracia no pueden verse comprometidas y que el conflicto militar no es una opción para los dos lados del Estrecho de Taiwán", dijo.

Citando el reciente discurso de Tsai en el Día Nacional de Taiwán , Chang dijo que Taiwán está dispuesto a trabajar con Beijing para encontrar "un acuerdo de mutuo acuerdo" para defender la paz y la seguridad en el Estrecho de Taiwán, siempre que se haga sobre la base de la racionalidad, la igualdad y el respeto mutuo.

Mientras tanto, el Consejo de Asuntos del Continente de Taiwán (MAC) emitió una declaración el domingo lamentando la continua "falta de un nuevo pensamiento y un juicio adecuado" de Beijing con respecto a sus políticas sobre Taiwán.

Solo el pueblo taiwanés tiene derecho a determinar su futuro y nunca aceptará las propuestas de China como el "consenso de 1992" o "un país, dos sistemas" como resultados, dijo el MAC.