La decimotercera legislatura de la democracia echa a rodar. La política española está obligada de nuevo a avanzar por un territorio desconocido, con un Parlamento más fragmentado que nunca, en el que la búsqueda de acuerdos será el pan de cada día. Para gestionar esta etapa incierta, tanto por su desarrollo diario como por su duración, ha sido elegida hoy como presidenta del Congreso, Meritxell Batet, diputada socialista por Barcelona y hasta ayer ministra de Política Territorial y Función Pública.

Su elección por parte del presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, ha sido interpretado como un gesto a Cataluña. Él mismo ha dicho hoy, en su intervención en una reunión de los parlamentarios socialistas, que la ha escogido no por su lugar de nacimiento sino porque representa "todo lo mejor que ha representado siempre el PSOE: lealtad al Estado, respeto a las instituciones y una vocación inquebrantable de diálogo y de tender puentes con el resto de fuerzas políticas".

Batet ha sido designada en segunda votación ya que en la primera no ha obtenido la mayoría absoluta de 176 diputados que es preceptiva. Tan sólo por uno. Ha logrado 175 votos frente a los que han conseguido otros aspirantes como Ana Pastor (PP), 67, Sara Giménez (Ciudadanos), 58, e Ignacio Gil Lázaro (Vox), 24 . En sus papeletas, los parlamentarios de ERC y los de Bildu han escrito "llibertat" y dibujado un lazo amarillo, lo que ha provocado que esos votos fueran nulos. Los de Junts per Catalunya han votado en blanco.

Se ha repetido, ya sólo con Batet y Pastor como únicas candidatas, y en la segunda ocasión, cuando sólo es necesario ser la más votada, los mismos 175 votos de la primera tanda le han convertido en la presidenta del Congreso de la decimotercera legislatura. La tercera mujer en presidir la institución después de la propia Ana Pastor y de Luisa Fernanda Rudi, ambas del PP.

Tras la elección de la nueva presidenta del Congreso se ha vuelto a votar por el mismo procedimiento a los vicepresidentes. En voto secreto y por urna. Los cuatro más votados ocupan por orden de apoyos las cuatro vicepresidencias del Congreso.

Estos van a ser Gloria Elizo (Podemos), la vicepresidenta primera, con 112 votos; Alfonso Rodríguez Gómez de Celis (PSOE), vicepresidente segundo, con 82; vicepresidenta tercera será a partir de ahora Ana Pastor (PP), con 70 votos, y vicepresidente cuarto Ignacio Prendes (Ciudadanos), con 58.