Región:
España
Categoría:
Sociedad
Article type:
Enfoques

¿Por qué el silencio es la palabra sin sonido?

  • ¿Por qué el silencio es la palabra sin sonido?
    ¿Por qué el silencio es la palabra sin sonido?
Región:
España
Categoría:
Sociedad
Article type:
Enfoques
Autor/es:
Por Héctor Heredia @hectorheredia33
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Se comunica al hablar, pero también se hace lo mismo cuando no pronunciamos una palabra, con el silencio, que es otro modo de comunicarnos. Cuando hacemos silencio tenemos distintas intencionalidades con el mensaje lo que no siempre asegura que nuestro interlocutor vaya a percibir su contenido o efecto tal como nosotros lo hayamos enviado.

 

La comunicación es un proceso clave en cada acción de nuestras vidas. Es la primera forma de vincularnos socialmente en cualquier ámbito en el que nos desarrollemos.  

Sin embargo, quizás por ser un hecho que realizamos de manera cotidiana, y en forma natural, no le prestamos la debida atención y no valoramos el potencial que puede otorgarnos. 

En primer lugar, se comunica al hablar, pero también se hace lo mismo cuando no pronunciamos una palabra, con el silencio, que es otro modo de comunicarnos. Cuando hacemos silencio tenemos distintas intencionalidades con el mensaje lo que no siempre asegura que nuestro interlocutor vaya a percibir su contenido o efecto tal como nosotros lo hayamos enviado. Es decir, puede que un silencio haya sido emitido como señal de frustración, por ejemplo, y que el interlocutor no perciba ese mismo sentimiento sino que considere que le han emitido otro totalmente distinto. Es el caso que se produce cuando un emisor transmite silencio como señal de frustración y el receptor cree que es rechazo, por citar un ejemplo. Lo cual demuestra que una mala interpretación de la intención comunicativa afecta a la comprensión del mensaje debido a que alguien emite un mensaje con un contenido específico que su interlocutor no logra descifrar o lo hace erróneamente. 

En este campo de análisis juegan un rol importante las subjetividades que todos tenemos y que, a veces, nos hacen creer algo que de ningún modo refleja lo que otra persona quiso o intentó manifestarnos.  

El silencio, por otra parte, es básicamente ausencia de sonidos. Por lo tanto, al no haber una palabra que ocupe un espacio en el circuito verbal comunicativo se producen distintas interpretaciones de parte de quien observa que su interlocutor ha dejado de hablar repentinamente para callar por algún motivo que solo él o ella conoce. 

Esto no significa que el silencio de quien nos ha dejado de hablar deba interpretarse siempre como un sentimiento negativo.  A veces solo se trata de una pausa, de un momento de introspección y de análisis interior, que nuestro interlocutor precisa para respondernos adecuadamente.  Es el ejemplo de quien escucha y piensa antes de responder.