Tras una década bajo el mandato del socialista Rafael Correa, el domingo en las urnas se elegirá un nuevo presidente para los próximos cuatro años. Con la medida, hasta ahora hay un total de 10.230 votos internos, de todas las cárceles del país. El voto carcelario comenzó a las 07:30, en un 73 % de las 71 juntas receptoras del voto establecidas por el Consejo Nacional Electoral (CNE) a nivel nacional; el otro 27 % inició dos horas después.
No obstante, a las 14:00, Juan Pablo Pozo, presidente del CNE, y Ledy Zúñiga, ministra de Justicia, brindaron una rueda de prensa conjunta para dar a conocer pormenores de la jornada y que a esa hora en la mayoría de los recintos electorales había culminado. Este voto, según Pozo, será el primero en ser escrutado junto con el sufragio de las 833 personas (adultas mayores o con capacidades reducidas) que se registraron para votar hoy en sus casas, con la asistencia de personal del CNE. Mientras tanto, los sobres con los votos especiales permanecerán bajo custodia de las Fuerzas Armadas.
Los candidatos que pelean por la presidencia del país se encuentran en el periodo de "silencio electoral", tal como lo establece la Ley. Pero, la mayoría de encuestas dan al candidato del Gobierno, Lenín Moreno, la delantera, pero su apoyo sería insuficiente para ganar en primera vuelta. En el balotaje, pactado para el 2 de abril, Moreno se enfrentaría a su más cercano perseguidor, Guillermo Lasso, o a Cynthia Viteri, quien a pesar de figurar como tercera en las encuestas registro una suba en intención de voto durante los últimos días.
El oficialista Lenín Moreno (63) estudió Administración Pública y se dedicó a la docencia. En 1998 quedó postrado en una silla de ruedas tras recibir un disparo en la médula durante un asalto. A partir de allí, Moreno cambió radicalmente su vida y se dedicó a dar charlas sobre motivación y humor y escribir una decena de libros como "Teoría y práctica del humor" y "Ser feliz es fácil y divertido", lo que incluso le valió la nominación al Premio Nobel de la Paz 2012, que ganó la Unión Europea. Moreno, quien se define como "un hombre que decidió volver a vivir" tras quedar parapléjico, es aficionado a la pintura, la natación, toca la guitarra y disfruta del canto. Acompañó a Correa en la vicepresidencia desde su asunción en el 2007 hasta el 2013 cuando su trabajo por las personas con discapacidad en Ecuador lo catapultó a Ginebra para desempeñarse como enviado especial del secretario de la ONU sobre Discapacidad y Accesibilidad. Durante su campaña, acompañado de Jorge Glas, su candidato a vicepresidente, Moreno prometió luchar contra la corrupción que salpica a Correa.
Guillermo Lasso (61) es conocido por haber sido el presidente del Banco Guayaquil durante casi 20 años, muchos acusan a Lasso de haber estado vinculado al Gobierno de Jamil Mahuad, bajo cuyo mandato se desató la crisis financiera de 1999, que obligó a miles de sus compatriotas a emigrar en busca de oportunidades dejando atrás un país sumido en el desempleo y la inflación. Lasso se defendió asegurando que su institución fue de las pocas que no cerró sus puertas ni entró en proceso de rescate financiero del Estado. Proveniente de una familia de clase media, estudió economía y, aunque nunca se recibió, logró el éxito en el mundo financiero. En el 2013 se postuló a las presidenciales, pero quedó en el segundo lugar muy por detrás de Correa, quien fue reelecto.
La sorpresa en estas elecciones es Cynthia Viteri (51). Pese a que en las últimas encuestas registró una importante suba en la intención de voto Viteri no se confía. La carismática abogada, política y periodista en las presidenciales del 2006 se quedó con las manos vacías, a pesar de haber estado en el pelotón de los tres primeros durante meses. "Estoy en medio de dos grandes fuerzas, por un lado el poder político atropellando, y por otro lado, el poder económico con todo su dinero, y en medio, esta mujer a quien ustedes ya pusieron en segunda vuelta electoral", dijo en un reciente acto donde expuso sus propuestas enmarcadas en el libre mercado. Desde 1998 fue diputada del Congreso, al que renunció a fines del año pasado para dedicarse a su campaña electoral, convirtiéndose en la asambleísta con mayor tiempo en funciones.
Las elecciones en Ecuador están siendo observadas por toda la región. Está en juego es el legado del presidente Rafael Correa y su “Revolución Ciudadana”, una reorganización nacional de una década que, según oficialistas, condujo a la creación de nuevos caminos, escuelas y ciudades, pero opositores afirman que hundió al país en una deuda compleja, pisoteó libertades civiles y generó corrupción.