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La Cámara de los Comunes de Reino Unido autorizó abandonar la UE
Una amplia mayoría, de 372 votos, en la Cámara Baja del Parlamento de Westminster dio luz verde para activar oficialmente el Brexit.
Otra vicoria parcial para la Primer Ministra, Theresa May, es lo que significa la aprovación de esta iniciativa legislativa, que fue forzada por el Tribunal Supremo. Y es parcial por que aun debe debatirse en la Cámara de los Lores. El proyecto autoriza a la jefa del Gobierno conservador invocar el Artículo 50 del Tratado de la UE, dando paso así a dos años de negociaciones sobre la escisión.
May consiguió sacar adelante la propuesta legislativa sin modificación alguna en los Comunes pese al centenar de enmiendas presentadas y respaldadas por diputados de la mayoría de partidos. El líder del Partido Laborista, Jeremy Corbyn, ordenó a los suyos alinearse con el Gobierno y secundar el "brexit", pero 52 parlamentarios de su formación rompieron la disciplina de voto bajo el argumento de que sus circunscripciones se decantaron por seguir en la UE en el referéndum del pasado 23 de junio. Los votos de esos laboristas rebeldes se sumaron a los del Partido Nacionalista Escocés (SNP) y la mayoría de los liberaldemócratas, que se manifestaron en contra de la ley.
Si la ley completa su recorrido sin problemas y en los plazos previstos, May podría acudir a la cumbre europea de Bruselas del 9 de marzo a invocar el Artículo 50 del Tratado de Lisboa, puerta de salida de la UE. May logró abortar ciertas insinuaciones a la rebeldía en las filas de su partido y apuesta ahora por activar los mecanismos formales de ruptura a partir del 9 de marzo, fecha en la que se llevará a cabo la Cumbre Europea en Malta.
En ese momento se habrán cumplido ocho meses desde el referéndum que sentenció la ruptura con Bruselas. Se espera que las conversaciones con la UE duren unos dos años, y se estima que Gran Bretaña podría dejar de formar parte de bloque europeo en 2019.
Los analistas consideran que May se fortaleció, pese a tener que hacer una serie de concesiones para garantizar la mayor transparencia durante las negociaciones, incluidos los informes periódicos de cada dos meses ante el Parlamento. Ahora, la llamada ley del Brexit entra en el último tramo parlamentario en la Cámara de los Lores, que volverá a tener acción el 20 de febrero, cuando concluya el último receso.
Entre los 805 lores, con una mayor representación de laboristas y liberales demócratas, el apoyo a la permanencia de Reino Unido en la Unión Europea era mayoritario antes del referéndum.