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Categoría:
Política

Vladimir Putin ¿Trumpista?

A días del recambio presidencial en los Estados Unidos, el presidente de Rusia, Vladimir Putin, defendió al magnate Donald Trump. Sostuvo la legitimidad de su victoria electoral e invitó a que el futuro Ejecutivo tome un lugar en la negociación por Siria.

El presidente de Rusia aseguró este martes que Donald Trump es víctima de una campaña política cuyo principal fin es “socavar la legitimidad del presidente electo de EE UU”. Trump consiguió una “convincente victoria” en las elecciones y quienes lo atacan con acusaciones "falsas" son “peores que prostitutas”, dijo el jefe del Estado. Putin negó que el nuevo presidente norteamericano hubiera sido espiado por los servicios de seguridad rusos durante su visita a Moscú.

Putin también aseguró que le costaba creer que Trump corriera al hotel a reunirse con prostitutas rusas, teniendo en cuenta que se había dedicado a organizar concursos de belleza y se relacionaba con las "mujeres más bellas del mundo". En conferencia de prensa, tras una breve pausa y ya entrado en tema, calificó a las prostitutas como "chicas con baja responsabilidad social, aunque son las mejores del mundo, sin duda" y mostró cierta comprensión por su trabajo. La prostitución dijo "es un fenómeno social feo y serio", y las "chicas jóvenes que se dedican a esto" lo hacen porque "de otro modo no pueden abastecerse de forma digna. Y esto en gran medida es "culpa de la sociedad y del Estado". Ahora bien, "la gente que encarga informaciones falsas del tipo que ahora se difunde en EE UU contra el presidente electo y las utilizan en la lucha política son "peores que prostitutas y no tienen ningunas barreras morales".

El presidente ruso cargó contra la Administración de Barack Obama por "despedirse pero no irse" y opinó que la "agudizada lucha política interna" en EE UU continúa, pese a la "convincente victoria" de Trump. En opinión de Putin, esa lucha responde a algunos fines "evidentes", siendo el primero de ellos "socavar la legitimidad del presidente elegido de EE UU", por parte de gente, que "lo quieran o no," "causan un gran daño a los intereses de EE UU".

Pese a esto, Putin, declaró la necesidad de "atar de pies y manos" al presidente electo "en el cumplimiento de sus promesas electorales en el interior y el exterior del país". "Imagínense cómo se puede hacer algo para mejorar las relaciones ruso-norteamericanas si lanzan cuentos como esa injerencia de un supuesto hacker en la campaña electoral", dijo. Putin aseguró que no conoce a Trump ni sabe lo que hará en el campo internacional, "por eso no tengo ninguna base para atacarlo, criticarlo o defenderlo", "pero estas filtraciones son una falsificación evidente", señaló. Explicó el líder ruso que, cuando Trump vino a Moscú, no se dedicaba a la política y "ni siquiera sabíamos de sus ambiciones políticas" "¿Acaso alguien piensa que nuestros servicios de seguridad persiguen a todos los multimillonarios norteamericanos? Claro que no. Esto es un desvarío", afirmó Putin.

Mientras ocurrían estas declaraciones, el ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, invitó a que el nuevo Ejecutivo nortemericano incorpore a delegados al diálogo sobre Siria. Según manifestó el martes en Moscú la cita programada para el 23 próximo en Astaná, capital de Kazajistán, aún está en fase de preparación y su “diferencia cualitativa más importante” con anteriores intentos de sentar a la mesa a todas las partes involucradas en la guerra civil en Siria será “la participación de gente que con las armas en la mano se enfrentan entre sí en tierra y que controlan determinado territorio en la República Árabe Siria”.