- Región:
- América
- Categoría:
- Política
Para Obama la principal amenaza terrorista son los lobos solitarios
Obama explicó que el primer paso en la estrategia para desmotivar a los lobos solitarios es desmantelar al Estado Islámico (ISIS) para reducir el “atractivo” del contenido que difunden a través de las redes sociales, al que llamó “veneno”
El presidente, Barack Obama, aseguró que a las organizaciones terroristas ya les queda muy difícil ejecutar “ataques a gran escala” en EEUU, por lo que las acciones de los “lobos solitarios” representan “el mayor peligro” que afrontan actualmente.
Obama participó en un foro organizado por CNN en la base de Fort Lee (Virginia) con militares y veteranos, uno de los sectores que más desaprueban la gestión del actual mandatario y que, según las encuestas, votarán por el republicano Donald Trump el próximo 8 de noviembre.
Confrontado por el aumento de ataques terroristas durante su mandato, que empezó en 2009, Obama defendió que Estados Unidos es hoy más seguro gracias a las mejoras en inteligencia y negó el incremento de atentados en el mundo pese a que algunos de alto perfil hayan ocurrido en Europa recientemente.
“Hemos visto varios incidentes aquí en el país”, reconoció Obama, al citar ataques como el de Orlando (Florida) que dejó 49 muertos en junio, pero también aseguró que “son un tipo de ataques diferentes a los del 11 de septiembre” porque “es más difícil para las organizaciones terroristas ejecutar ataques a gran escala”.
“El reto que tenemos, que es un reto que vamos a tener por un tiempo, es la posibilidad de que individuos o pequeños grupos se inspiren y estén dispuestos a morir para hacer daño, aunque no estén dirigidos desde el exterior, estos ataques de lobos solitarios van a ser nuestro mayor peligro”, añadió.
Obama explicó que el primer paso en la estrategia para desmotivar a los lobos solitarios es desmantelar al Estado Islámico (ISIS) para reducir el “atractivo” del contenido que difunden a través de las redes sociales, al que llamó “veneno”.
Horas antes de su aparición en el plató de CNN, Obama había anunciado el envío de 600 soldados a Irak, con lo que el número total ya supera los 5,000, para ayudar a liberar a Mosul de las garras del Estado Islámico, su bastión en ese país.
Más tarde, ya en el foro, el presidente aseguró que las fuerzas estadounidense se ocuparán de los ataques aéreos y de brindar apoyo logístico a los iraquíes, pero no entrarán en combate directo con los yihadistas.
“Soy consciente de que cada vez que nuestros uniformados están en escenarios de guerra hay un riesgo. Aunque cuando llegué a la Casa Blanca teníamos a 100,000 soldados desplegados y ahora tenemos a 15,000 entre Irak y Afganistán, cada uno de ellos está participando en una lucha que es peligrosa”, reconoció Obama.
Tras responder a la pregunta sobre los atentados, la madre de un joven soldado de 19 años muerto en 2007 en Irak interrogó a Obama por su negativa a usar el término “terrorismo islámico”, una de las principales críticas que también le hace Trump.
“Estos tipos (los yihadistas) creen y reivindican que hablan por el islam, pero yo no quiero validar lo que hacen (…). Vamos a llamar a estos tipos lo que son, unos terroristas y unos asesinos”, respondió Obama, quien aseguró, además, que relacionar terrorismo e islam deteriora las relaciones de EEUU con sus aliados musulmanes.
Preguntado por la anulación de su veto ejercida hoy por el Congreso a ley que permite a los estadounidenses demandar al Gobierno de Arabia Saudí por su supuesto papel en los atentados del 11 de septiembre de 2001, Obama lo tildó de “error” y “peligroso precedente”.
“La preocupación que tengo no tiene nada que ver con Arabia Saudí en concreto, o mi compasión por las familias del 11 de septiembre. Tiene que ver con que no quiero una situación en la que de manera súbita nos veamos expuestos a responsabilidades por el trabajo que hacemos en todo el mundo”, subrayó Obama.
Finalmente, el mandatario defendió el polémico gesto iniciado por el jugador de fútbol americano Colin Kaepernick y secundado por varios deportistas de permanecer sentados durante el himno nacional por las frecuentes casos de violencia policial contra afroamericanos.
“Me gustaría que entiendan el dolor que causan (los deportistas) a personas que han perdido a su esposo o hijo en combate y porque a ellos les duele que no se levanten, pero también me gustaría que la gente piense en el dolor de alguien que ha perdido a un ser querido en un tiroteo que consideran injusto”, dijo.
fuente: EFE